Según los taoístas, en la saliva se encuentra el elixir de la longevidad que es generada cuando la mayor parte de los meridianos Yin y Yang se unen y también al colocar la lengua hacia arriba conectando el paladar superior con los canales Du y Ren Mai de la “órbita micro cósmica”.
Al aparecer estos síntomas es cuando se recomienda comer más cuidadosamente y prestar mayor atención a la calidad de los alimentos que no sean refinados o de bajo valor nutritivo.
“Comer una comida al día, porque todas la causas de las enfermedades vienen dadas principalmente por el estancamiento de los alimentos” es una regla que establece un Sutra budista y que hoy en día es seguido por muchos budistas. Y en el Taoísmo se dice: “el que come en exceso durante la noche perderá un día de su vida” y “el que va a la cama borracho perderá un mes de su vida” indicando la importancia que tiene la alimentación en el camino espiritual.
Estos consejos no están solo en las religiones orientales sino que también se encuentran en el Catolicismo: "No os preocupéis por lo que comeréis y beberéis, porque la vida es más que la carne. Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que perdura y lleva hacia la vida eterna. El que cree en mí, de su interior correrán ríos de agua viva”. Jesús al igual que sus seguidores practicó el ayuno y cuando la comida escaseaba no se sentían afligidos sino contentos y felices.
Según los antiguos taoístas, la función digestiva esta descrita como una transformación del aliento o respiración. Y dicen que: “todo alimento, ya sea líquido o sólido, desciende hasta el estómago donde es transformado por el bazo a cada intervalo de inhalación y exhalación y de los cinco sabores (dulce, agrio, salado, amargo y picante) en un soplo de Qi”.
Estas respiraciones están relacionadas con los cinco elementos y los cinco órganos y la comida es transformada y separada en dos partes, una impura que es excreta y otra parte pura que se convierte en energía Qi y se mezcla con la esencia del agua para producir sangre.
Según la dietética tradicional china: La respiración de cada órgano tiene que estar equilibrada para obtener una armonía interior y cuando hay un exceso o deficiencia de un órgano este puede afectar a los otros. Por ejemplo el sabor ácido (madera) que afecta a los ojos y músculos se refuerza con la carne de cordero y el maíz. El sabor amargo (fuego) relacionado al corazón, la lengua y la sangre se fortalece con la carne de pollo y guisantes. El sabor dulce (tierra) del bazo, la boca y la carne se alimenta de carne de vacuno y mijo. El Agrio (metal) de los pulmones, la nariz, la piel y el cabello se nutre de carne de perro y granos que producen aceite. Y el sabor salado (agua) de los riñones, los oídos y los huesos se alimenta de carne de cerdo y sorgo.
Estos cinco sabores tienen que estar equilibrados y presentes en cada comida, para mantener una correcta salud.
Cuando se come demasiado, la respiración puede verse obstruida y los centros psíquicos bloqueados. Este es uno de los principales motivos por los cuales los taoístas practicaban el método de la alimentación a través de la respiración para conseguir un cuerpo más ligero y ágil absorbiendo energía Qi y evitando algunos alimentos.
Los primeros alimentos que evitan son los cinco granos: el trigo, cebada, mijo, sorgo y arroz y se decía que cuando no se consumen durante un año se purifican los intestinos y se detiene la degeneración del organismo mediante la destrucción de los "tres gusanos” que viven en los tres centros energéticos o Dan Tien. Estos tres “gusanos” metafóricos son los que conducen a la persona a la muerte sin la iluminación y que se alimentan de estos cinco granos.
La abstinencia es una práctica difícil de llevar y hoy en día se recomienda encontrar un buen maestro Taoísta que te inicie en las antiguas prácticas del Pi Ku “abstinencia de los cinco granos”, un término muy común de la cultura china pero de origen taoísta.
Otros alimentos que se deben evitar cuando se sigue una práctica profunda de QiGong son la cebolla, el ajo, los puerros, el ajenjo y la mostaza, debido a que tienen un efecto afrodisíaco. Por ejemplo la cebolla, según la dietética china, aumenta la producción de líquido seminal causando un incremento de la libido y excitar la mente.
También hay que tener cuidado con las comidas y bebidas frías pues alteran la respiración, estas deben estar siempre calientes o templadas tanto en verano como en invierno ya que un cuerpo sano irradia calor a partir de los tres Dan Tiens.
El ayuno es otro aspecto que ha jugado un papel crucial en el ritual taoísta, así como otras religiones del mundo. Antiguamente los taoístas tenían al menos diez días de ayuno al mes, cada uno en honor a las divinidades taoístas. Y durante el año, las ocho fechas relacionadas a los solsticios y comienzos de estación se celebraban ritualmente con un ayuno.
El ayuno se puede utilizar para vaciar y limpiar los intestinos de cualquier obstrucción. Cuando los intestinos están obstruidos de material de desecho se puede dar una intoxicación del organismo que hará un descenso de las defensas o Qi defensivo, es por ello, que evitar los cinco grados en periodos cortos de tiempo es recomendable para limpiar y regenerar la flora intestinal.
Hoy en día, sabemos que muchas enfermedades provienen de la sobrealimentación y es recomendado comer pequeñas cantidades varias veces al día que una gran cantidad una vez. Y levantarse de la mesa con el estómago medio lleno.
Para yoguis de la India el proceso de la digestión comienza en la lengua, donde se extrae el "prana" de los alimentos. Como es conocido por los maestros de Yoga, la masticación adecuada de los alimentos produce una despolarización de los mismos (yin y yang), lo que permite absorber mejor el “prana” o Qi en cada bocado.
En antiguas prácticas meditativas taoístas, también se recomendaba no comer alimentos con sabores amargos, salados, o alimentos aceitosos y grasos antes de la meditación ya que ocasionaban daños en los órganos internos. Y evitar la carne de perro, cerdo, las frutas crudas, e incluso el olor de la carne animal.
Para terminar recomendar sustituir la sal común por la sal marina. Evitar el azúcar blanco refinado, las harinas blancas y todos los cereales refinados sustituyéndoles por productos enteros o integrales, evitar el consumo de carne, si es posible. Y dormir ocho horas al dia.
Estas son algunas de las pautas que cada individuo tiene que encontrar para ayudar a su ritmo metabólico. Aunque a medida que uno practique QiGong, encontrará que necesita comer menos y dormirá mejor. Hay maestros que comen muy poco y duermen cuando el cuerpo, la mente y el espíritu están unidos.
Según algunos maestros Taoístas, el sueño también es un método de Qigong cuando se consigue liberar la mente de la identificación corporal haciendo que la fuerza de la vida se funda con los canales psíquicos para sanarlos y rejuvenecerlos. “Pero esta, es historia de otro cantar”