Al igual que en otros estilos de Tai Chi Chuan, el entrenamiento del estilo Yang incluye secuencias, o como suelen llamarse “formas”, desarrolladas con menos movimientos. Estas secuencias tienen su finalidad de aprendizaje dependiendo de cada forma, desde la forma de 24 movimientos que llegó el siglo pasado en torno a los años 50 y cuyo objetivo era promover la salud en personas mayores, hasta las formas cortas de 37, 40 y 42, o las más sencillas como las de 8 y 13 movimientos que han ido apareciendo. Todas ellas tienen una función dentro del aprendizaje del estilo Yang de Tai Chi Chuan.